
Fuente: socialstore.es
Vuelvo hoy a uno de los ejes sobre los que pretendo hacer girar el contenido de este blog, para comenzar a hablar sobre
redes sociales desde la reflexión que considero imprescindible, antes incluso de dar de alta una cuenta en una sola de las redes sociales existentes.La experiencia me ha enseñado que, bien por carácter o bien por costumbre, los españoles somos dados a comenzar la casa por el tejado. Y en esto de las redes sociales no puede ser menos. Cada día tengo ocasión de comprobar que lo primero que hacemos es crear la/s cuenta/s y después dudar sobre
cómo vamos a hacer para gestionarla/s si ya nos faltaba tiempo antes.Ante esto, la primera recomendación es que
no tenemos por qué estar presentes en todas y cada una de las redes sociales que surgen. Más bien al contrario, resulta aconsejable elegir una para comenzar e ir decidiendo con el uso si esa red nos resulta o no útil, interesante o conveniente, y la velocidad a que nos ‘extendemos’ o trasladamos a otras redes. Así que, primer aviso a navegantes, si llego tarde es aconsejable cerrar aquellas cuentas en redes que no se están utilizando.
Mantener una cuenta abierta y abandonada transmite una imagen negativa de nosotros. 
Fuente: www.boxbaster.com
Para comenzar yo os aconsejo elegir entre el ambiente más desenfadado de
Facebook o el más profesional de
Twitter. Cualquiera de ellas es una buena opción para introducirnos en las redes sociales.Una vez que hemos elegido la cuenta -o las cuentas para los más atrevidos- resulta imprescindible
seleccionar los momentos que le vamos a dedicar. Este es un criterio casi único por cada usuario. En términos generales, podemos elegir el momento del día en función de la disponibilidad de horarios por el trabajo, las obligaciones o simplemente por nuestra disposición a conversar a través del ordenador, el móvil o la tableta.Si solo tenemos una cuenta, y por ejemplo es en
Facebook, yo aconsejo seguirla a media mañana -en el descanso del trabajo- o a partir de la tarde/noche.
Facebook es uno de los sitios más dados a disfrutar de las fotos, las conversaciones de amigos y los eventos que se han ido publicando, durante la noche. Este suele ser el momento del día en que nos permitimos un poco de relax y nos damos tiempo para conversar con familiares y amigos.

Fuente: noticias.area7g.com
Si la cuenta es de
Twitter, sin lugar a dudas debemos echar un vistazo al menos a primera hora de la mañana.
Los tuits son una buena opción para informarnos de los principales titulares de prensa en apenas unos minutos. Consultar un grupo de unos 50 tuits y nuestras interacciones, ya sean menciones o nuevos seguidores, no requiere más de diez o quince minutos. Por la noche resulta innecesario casi recordar que Twitter se ha convertido en compañero indispensable de retransmisiones deportivas, proyecciones de películas y programas de televisión.

Fuente: www.marketingdirecto.com
En este punto es aconsejable reflejar por escrito cuándo hemos decidido utilizar las redes, si vamos a participar todos los días o solo algunos y durante cuánto tiempo vamos a estar navegando. La planificación solo lleva unos minutos y suele ser una buena compañera de viaje para quienes se preocupan por amortizar su tiempo.

Fuente: tonybarbosa.wordpress.com
Una vez que tenemos claro todos estos detalles, es muy importante que tratemos de
cumplir nuestro propósito. Él creará un hábito y permitirá que resulte más fácil encontrar esos ‘tiempos muertos’ que todos tenemos para hacer un seguimiento más frecuente. El viaje en autobús urbano, la espera en la sala del médico, el retraso en la hora de comienzo de una reunión, ese café solitario, la pausa publicitaria, la llamada que no llega…¿Cuándo sueles tú consultar las redes? ¿Sigues e intervienes o solo lees lo que otros escriben? ¿Qué otras redes incluirías entre las básicas para comenzar? ¿Crees que los horarios señalados son los más aconsejables? Es tu turno.(Hablaremos del uso profesional de las redes en el próximo artículo)