La inauguración de la Bodega Nido de Cuco, que tuvo lugar el 24 de octubre, no solo atrajo las miradas de personalidades influyentes, sino que además dejó patente un compromiso firme con la sostenibilidad y el respeto por el entorno. Desde su concepción, la bodega ha apostado por prácticas vitivinícolas responsables, la optimización de los recursos hídricos y energéticos, y la recuperación de variedades autóctonas, reforzando así su conexión con la tierra y el paisaje que la acoge.

El evento, que fue certificado por AENOR como neutro en emisiones de CO2. contó con la asistencia de figuras destacadas que abarcaron distintos ámbitos, aportando un cariz multidimensional a la jornada. La actriz Vanesa Romero imprimió una nota de sofisticación; el consultor estratégico y ex político Albert Rivera aportó un matiz social; el torero Pepín Liria subrayó el arraigo cultural de la región, y la presencia del presidente Fernando López Miras supuso un aval institucional a la iniciativa. Cada uno, desde su posicionamiento y relevancia, contribuyó a la repercusión mediática del lanzamiento.

Como Directora de Comunicación de Grupo Sureste, mi papel fue asegurar que este mensaje integral —donde tradición, innovación y sostenibilidad se entrelazan— se proyectara con claridad. La cobertura mediática previa y posterior, el cuidado en la selección de invitados, y el diálogo con todos los canales de divulgación se combinaron para destacar la identidad genuina de la bodega. Además, las referencias a sus métodos de cultivo responsables y su gestión respetuosa del entorno no solo quedaron en el discurso: formaron parte del relato compartido entre los asistentes y circularon con fuerza en redes sociales y canales especializados.

Gracias a la presencia de caras conocidas y a un plan de comunicación estratégico, la Bodega Nido de Cuco consiguió ir más allá de la típica inauguración vinícola. Se presentó al mercado como una marca comprometida con el medio ambiente, con la revitalización de la cultura local y con la calidad en cada botella, sentando las bases para una proyección sólida y coherente en el panorama enológico actual.

Quiero mostrar todo mi agradecmiento a la Familia Colucho por su confianza en mí, que me permitió participar en la organización y la comunicación del acontecimiento del año en el sector del vino, en la DOP Jumilla.